lunes, 22 de febrero de 2010

La piel fría.

    Me atrevo a decir, sin llegar a exagerar, que "La piel fría" de Albert Sánchez Piñol es una de las mejores novelas de ficción que se ha escrito en los últimos años. Hacía mucho tiempo que un libro no conseguía atraparme tanto como éste lo ha hecho en las escasas páginas que estructuran una historia bien contada y, lo más importante, hilvanada al milímetro.



    Albert Sánchez Piñol sólo necesita de tres personajes principales -apoyados en algún que otro secundario durante escasos momentos- para elaborar una historia en la que el misterio, la introspección, la acción y la degradación, impotencia y desgaste de los actores protagonistas se mezclan de tal forma que lo que dábamos por hecho en el inicio no lo parece tanto en otros momentos. Su autor, quien sabe jugar bastante bien a la confusión y, sobre todo, sabe mantener el interés y la tensión hacia los sucesos que acontecerán en posteriores páginas, tiene varios puntos a favor para lograr una novela redonda. Estos son, una forma de narrar sencilla y cercana y, un argumento perfecto.

    "La piel fría" es de esos tipos de libros a los que hay que enfrentarse desprovistos de cualquier influencia previa. Por eso no caeré en el error de desvelar ningún aspecto importante del argumento. Sólo diré que es de ese tipo de lecturas en las que avanzar por sus páginas se transforma en una extraordinaria aventura creativa e imaginativa; y, que al final, cuando te enfrentas a la última hoja recuerdas -sin poder evitarlo, y con una brizna de desazón en la sonrisa dibujada en el rostro- el nombre de Battis Caffó.

 
Cartel promocional de la adaptación cinematográfica del libro.


    Una minúscula isla perdida en mitad del océano, sin ningún tipo de comunicación con el exterior. Y un hombre que acepta ejercer durante un año el puesto de "oficial atmosférico" en la la misma. En ella también hay un faro, donde vive otro hombre. Ningún habitante más. Así se inicia "La piel fría", el resto hay que descubrirlo...


2 comentarios:

  1. Recuerdo el fragmento que escribiste sobre la subjetividad que me emocionó muchísimo y resultó ser de este libro.

    Tengo ganas de leerlo y ahora que sé esas pinceladas del argumento, más.

    Nuestras opiniones están influenciadas por la comparación y ahora tenemos tantos referentes, que sin duda se ven influídas por el exceso de los mismos.

    Imagino la vida en una isla con la única presencia de otra persona ... ¡la de momentos y cambio de percepciones y opiniones que deben darse!

    Vamos, que lo anoto porque estoy entusiasmada! (a lo Vicky el vikingo) XDD

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  2. Parece interesante, además yo soy fan de todas las cosas que tienen que ver con islas solitarias. Bueno, y también con los zombies, por eso ahora me estoy leyendo Apocalipsis Zombie, que me gusta porque se desarrolla en Galicia y eso es nuevo.

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