viernes, 4 de junio de 2010

Ella y él.

El día en que ella entró en él.
El día que él entró en ella.


 Ella y él.

Ella sintió las manos ajenas, el corazón bombeante, las miradas distantes.
Él sintió las piernas errantes, la sonrisa innata y olvidada, el miedo defensivo.

Le gustaba imaginar vidas, creándolas, aunque por ello la realidad se volviera secundaria. Dar vida. A ella en él.
Le gustaba andar analizando todas las imágenes, inmortalizándolas, aunque dejase de escuchar. Sólo visión. A él en ella.

Pero odiaba sentir como él. Cambiante. Inmóvil.
Él disfrutaba con sus nuevas sensaciones, en cambio.

Emociones de segunda mano. Tirarlas. Expulsarlas.
Cuerpo de segunda mano. Poseerlo.



Él y ella.

El día que ella decidió escapar de él.
El día que él maldijo escapar de ella.

3 comentarios:

  1. lo sabes, te lo he dicho. y aún así, aunque no te lo dijera, lo sentirías.

    te quiero. no hay mejor regalo que alguien te dedique algo como esto.

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